El proceso electoral en la Corte Suprema de Justicia para designar magistrados, está en su punto de debate más alto. El anuncio del presidente Iván Duque de enviar la terna para la elección del Fiscal General al alto tribunal solo cuando estén completos los integrantes del máximo organismo de la jurisdicción ordinaria, volcó la atención en las elecciones internas para ocupar varias vacantes, con un nombre que despierta interrogantes.
De los 23 integrantes de la Corte Suprema, solo hay 18 magistrados titulares y cinco vacantes. En el entretanto, el nombre de un aspirante que integra una de las listas que envió el Consejo Superior de la Judicatura, para su elección, es visto con recelo por un sector y con acetapción por el otro.
Se trata de Fabio Ospitia Garzón, quien durante ocho años se desempeñó como magistrado auxiliar de Leonidas Bustos, expresidente de la Corte Suprema y acusado por la Comisión de Acusaciones, el pasado 14 de mayo, por los presuntos delitos de concierto para delinquir, cohecho propio y tráfico de influencias.
Acusación que se fundamenta, entre otros elementos, en los señalamientos de Luis Gustavo Moreno, exjefe de la Unidad Nacional Anticorrupción de la Fiscalía, quien paga una condena de 48 meses en una prisión de Estados Unidos por conspiración para lavar dinero, para cometer fraude en giros bancarios y fraude bancario. El exfuncionario delató y aseguró que Bustos fue el cerebro del mayor caso de corrupción judicial en el país, cambios y trámites por dinero, en lo que se ha conocido como el ‘cartel de la toga’.
Una elección de magistrados que se comenzó el pasado 2 de diciembre, cuando vencieron los periodos de ocho años, de los magistrados Jorge Mauricio Burgos Ruiz, Luis Gabriel Miranda y Fernando Castro. Y el más reciente, el 11 de marzo pasado, correspondiente a José Luis Barceló. Así las cosas, el Consejo Superior de la Judicatura, remitió en el mes de diciembre las lista de elegibles para reemplazar a los togados.
Un panorama electoral que se hizo más complejo, porque pasaron varios meses y la elección no se definió. Por el contrario, dos hechos enredaron las decisiones. El primero, fue la suspensión del magistrado de la Sala Penal, Gustavo Malo. La propia Corte ordenó su captura y fue enviado a prisión señalado por delitos relacionados tambien con el denominado ‘cartel de la toga`. En su cargo, fue designado la semana pasada, Jaime Humberto Moreno, quien culminará el periodo de un año y medio que le restaba a Malo para finalizar su magistratura de ocho años.
Otro factor que complicó las elecciones en la Corte Suprema, fue la reciente salida de Margarita Cabello, designada por el presidente Iván Duque para ocupar el cargo de ministra Justicia. Con lo cual se completaron cinco vacantes, en el máximo tribunal de la jurisdicción ordinaria.
Fabio Ospitia, es un abogado de trayectoria en la Corte Suprema de Justicia. Según registros de esa corporación, es funcionario desde 1983. Vivió la toma del Palacio de Justicia por parte del movimiento guerrillero M-19 en 1985. Inicialmente como funcionario y desde hace 21 años es magistrado auxiliar encargado y titular. Una labor que desempeñó al lado de reconocidos togados como Guillermo Duque y Fernando Arboleda Ripoll.
Pero, el entonces magistrado Leonidas Bustos se convirtió en su redentor. Mediante decreto 054 del 19 de febrero de 2015, designó a Fabio Ospitia Garzón en el cargo de magistrado auxiliar en propiedad asignado a su despacho, pues hasta ese momento estaba en provisionalidad.
Fueron varios años de aparente normalidad y en donde se afirma que Leonidas Bustos se consolidó como uno de los hombres más poderosos de la justicia y en su equipo de trabajo se destacó Ospitia Garzón, quien manejaba asuntos de casación y revisión.
Pero empezaron a destaparse nuevos entramados de la justicia. Según la resolución 0576 del 15 de mayo de 2018, mediante la cual el entonces fiscal general, Néstor Humberto Martínez, le otorgó principio de oportunidad a Luis Gustavo Moreno, exjefe de la Unidad Nacional Anticorrupción de la Fiscalía, prendió el ventilador y le dio vida pública a lo que se conoce como el ‘cartel de la toga’.
Una delación que evidenció que desde el 2012 hasta el año 2016, habría operado una red de decisiones y trámites procesales espuríos. “Su condición de abogado litigante, en el ejercicio de esta función desde el 2012 hasta el año 2016, habría participado en por lo menos (11) eventos como intermediario entre varios exmagistrados de la Corte Suprema de Justicia y funcionarios y exfuncionarios públicos, para favorecer los intereses de estos últimos en actuaciones judiciales que se seguían en su contra. Todo ello, a cambio del cobro de millonarias sumas de dinero...”, señala el acuerdo de Moreno con la Fiscalía.
Y a partir de esta situación se evidenciaron coincidencias que ponen la lupa contra el aspirante a magistrado Ospitia. Quien le dio la oportunidad de pasar de magistrado auxiliar a titular fue Leonidas Bustos, quien llegó a la Corte en el año 2008. En concreto, pasar de un cargo que ocupaba desde el 16 de octubre de 1995 como magistrado auxiliar itinerante a titular el 19 de febrero de 2015. Paradójicamente, según se desprende de los documentos oficiales de la Fiscalía, la Corte Suprema de Justicia y la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes, un periodo paralero al que funcionó el ‘cartel de la toga’.
A este hecho, se suman las grabaciones de conversaciones entre Alejandro Lyons, exgobernador de Córdoba y el abogado Leonardo Pinilla efectuadas por la DEA y que se convirtieron en la prueba clave del referido 'cartel'. Aunque no se menciona a Fabio Ospitia, los dos procesados evidenciaron el caso.
Al referirse al poder de Leonidas Bustos, Pinilla le comentó a Lyons sobre lo que el magistrado representaba en la Corte, “ese man fue muy líder en la Sala. Ese man era el que mandaba en esa hijueputa Sala, tenía garra, con Gustavo Malo, fue quien lo nombró, de repente. Entonces estaban por este lado, tal, entonces Patricia Salazar había sido auxiliar de Malo, estaba ahí al lado de (no se entiende), entonces ya iban dos. Y Leonidas tenía a Eyder, que después se le volteó, pero al principio Eyder fue firme con Leonidas. Barceló era aparte, María del Rosario era aparte, Salazar era de este lado. Y Castro no era ni para aquí ni para allá, a veces jugaba, pero ese man era presidente de la corte o sea Suprema, presidente de Sala”.
No obstante, a las similitudes de fechas, revisados los registros de la justicia sobre Fabio Ospitia Garzón, quien aspira a suceder en el cargo a José Luis Barceló, no hay ninguna investigación vigente, ni ningún testigo en procesos lo ha señalado.
Por el contrario, hay un detalle que puede significar un salvavidas para Ospitia en los cuestionamientos éticos que se le plantean por su cercanía con Bustos. Es la supuesta enemistad que existió entre Leonidas Bustos y José Luis Barceló. En los pasillos de la Corte se rumoreó en su momento sobre una acalorada discusión que casi termina en golpes. Así como la oposición que hizo Barceló a la reelección de Bustos como presidente de la Sala Penal en el año 2013.
Sin embargo, la supuesta petición de Barceló a sus homólogos en la Corte de votar por Fabio Ospitia como su reemplazo, al parecer, no logró matricularlo del todo como la mano derecha del exmagistrado, mediático, por abrirle investigación al expresidente y hoy senador Álvaro Uribe, con quien en los últimos meses en su cargo sostuvo una controversia pública.
La lista de aspirantes al cargo que compiten con Ospitia son también juristas de trayectoria. Cándida Araque, Pedro Oriol Avella, Gloria Castaño, Diego Corredor, Alfonso Daza, Alexandra García, Hadith Hernández, José Hinestroza y Daniel Jiménez.
Una elección intensa. De hecho, hace varias semanas ya hubo una primera votación en esta lista y el magistrado Ospitia obtuvo importantes sufragios, aunque no suficientes porque se necesitan 16 votos para lograr el nombramiento. Elección que continuará en los próximos días. Sin embargo, al interior de la Corte se valora el trabajo del funcionario, ya que pasó del despacho de Leonidas Bustos y actualmente labora como auxiliar del magistrado de la Sala Casación Penal, José Francisco Acuña.
Consultado el magistrado Ospitia Garzón sobre su posición frente al exmagistrado Leonidas Bustos y el `cartel de la toga’, este le manifestó a la Agencia de Periodismo Investigativo, API, que no se pronunciará al respecto para no afectar el curso normal de la elección en la Corte Suprema de Justicia.
Fuentes cercanas al magistrado Ospitia que pidieron el anonimato indicaron que “el haber trabajado con una persona que tiene problemas con la justicia no hace al doctor Ospitia un delincuente, ni es un impedimento para aspirar al cargo”.
Señala la fuente que Ospitia se enteró de la situación de su exjefe Leonidas Bustos por los medios de comunicación y mucho después que este dejara el cargo”. En caso de ser elegido en la próxima sesión de Sala Plena, Ospitia Garzón, no podrá cumplir el periodo de ocho años, pues nació el 24 de septiembre de 1953, tiene 65 años y estaría a cinco años de la edad legal de retiro forzoso. Los magistrados del alto tribunal tienen la última palabra.
