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Estrategias de un médico en juicio por asesinato de mascota

Carlos Mora afronta proceso penal por causar muerte violenta a perrita de vecina que mide 20 centímetros. En juicio, su defensa recusó a juez del caso por aparecer en fotos con mascotas. Desde 2016 más de 150.000 animales maltratados.

Por Agencia Periodismo Investigativo |

Carlos Alberto Mora Alape es un médico de 51 años. Enfrenta a la justicia penal por maltrato animal agravado. En un caso sin antecedentes, porque asesinó a la mascota de un vecino. El juicio avanza y con un fallo próximo a emitirse, el facultativo se defiende acudiendo a la filigrana jurídica.  

La más reciente estrategia se evidenció, el pasado 5 de septiembre. Ese día, recusó a la juez 28 penal Municipal de Bogotá que lleva el proceso porque en las redes sociales, la funcionaria ha subido fotografías de mascotas. Por esto, argumenta que esta es una prueba de que la funcionaria judicial es animalista y debe ser separada del caso. 

Una fiscal acusó al médico Mora Alape de un delito, el maltrato animal, que se incluyó en el Código Penal, en enero del año 2016. En concreto, porque tres años atrás ultimó a patadas a una perrita de raza Yorker de 20 centímetros. Le fracturó las costillas y sus fragmentos le destrozaron los pulmones, según quedó registrado en la necropsia. 

Todo comenzó el 13 de julio de 2016 cuando la vida cambió para dos vecinos. Ese día, Juliana Suárez Gómez salió con su mascota, la pequeña Blair, quien ladrando corrió hacia el pasto. Emiliano, un pequeño de cuatro años se asustó y se aferró a su madre Catalina. La reacción del niño asustó a la mascota y este lo mordió en su pantorrilla.

Juliana se disculpó con la madre del niño, le advirtió que la mascota estaba al día en vacunas y ofreció ponerle a disposición el carnet de vacunación. Horas después, alrededor de las siete de la noche, Teresa Delgado, quien le colabora a la familia Suarez Gómez con los quehaceres de la casa sacó una vez más a hacer sus necesidades a Blair y al otro perro de la familia, Benji un grenchudo poodle.

Paseador de perros en Bogotá



Bajó por las escaleras. Justo en ese momento subía el médico Carlos Alberto Mora Alape, padre del menor de cuatro años. Furioso le rapó las traíllas de las manos a Teresa y empezó a patear a las mascotas. 

A pesar de los gemidos de los animales no se detuvo. El escándalo alertó a Catalina la esposa del galeno y madre del niño quien intentó calmarlo, pero no fue posible. Blair murió porque sus costillas rotas le perforaron los pulmones, Benji pasó varios días en la clínica, se salvó de la golpiza.

Catalina cogió con sus manos a Blair y se lo entregó a Teresa. Luego tomó del brazo a Carlos Alberto y lo lleva hasta el apartamento, la puerta se cerró sin respuesta alguna. El yorker que acompañó durante siete años a la familia Suarez Gómez ya estaba muerto. Ese fue el último día que la familia propietaria de Blair y Benji vio al médico. 

Esa noche Juliana Suárez, quien la tarde del incidente sacó a Blair a orinar, contó su historia en una de sus redes sociales, “quería contarles lo que le pasó hace unas horas a mi perrita que es un yorkie. Se llama Blair y los que la conocen saben que es una perrita juiciosa y cariñosa. Ha estado conmigo desde que nació y nunca hemos tenido ningún problema con ella”

Entregó otros detalles de lo que sucedió, “el niño se asustó con los ladridos de Blair y ella, así mismo, se asustó y lo mordió. La mordida fue pequeña, le cogio con los dientes la pierna (sin cerrar la mandíbula ni arrancarle ningún pedazo ni mucho menos). Fue una pequeña mordida, y presenté las debidas disculpas a la mamá por el comportamiento de la perrita”.

 

Relato de la dueña de Blair el perro que mataron a goles



Juliana, aún desconcertada por la muerte de su mascota a manos de su vecino narró que este agredió a su empleada Teresa y que luego pateó a su perro hasta la muerte. “Es difícil de creer, yo todavía no puedo creerlo, que alguien sea capaz de cometer este acto. Estamos siguiendo el debido proceso para que esto tenga consecuencias sobre el señor. Benji se encuentra en cuidados intensivos tratando de luchar por sobrevivir” indicó la joven.

Finalmente, indicó que posteaba la historia en las redes en busca de una sanción social en caso que la ley no resolviera el tema. Pero la justicia llegó. El 9 de septiembre de 2016, su madre Silvia Gómez interpuso el denunció en Fiscalía por el delito de maltrato animal contra su vecino, el médico Carlos Alberto Mora Alape.

Y es que justamente seis meses antes de que Mora Alape golpeara a la perrita de raza yorker hasta la muerte, el presidente Juan Manuel Santos sancionó la ley 1774 de enero 6 de 2016.

Se trata de una norma mediante la cual, el Congreso penalizó el maltrato animal. Una ley de 11 artículos a través de la cual el Legislativo se propuso reducir las cifras alarmantes de maltrato animal en el país.

Precisamente, el artículo mediante el cual la Fiscalía le imputó cargos a Mora Alape es el 339A del Código Penal que establece, “El que, por cualquier medio o procedimiento maltrate a un animal doméstico, amansado, silvestre vertebrado o exótico vertebrado, causándole la muerte o lesiones que menoscaben gravemente su salud o integridad física, incurrirá en pena de prisión de doce (12) a treinta y seis (36) meses, e inhabilidad especial de uno (1) a tres (3) años para el ejercicio de profesión, oficio, comercio o tenencia que tenga relación con los animales (...).

Maltrato animal


Si bien la ley ha sido insuficiente para mitigar los casos de maltrato animal, en Colombia sí se convirtió en el primer paso del país para atender la evolución que ha tenido el derecho en muchos países en defensa de los animales. De hecho, en el año 2015 el parlamento francés dejó atrás el código civil napoleónico que categorizó a los animales como bienes muebles, es decir, cosas y les dio la categoría de seres sintientes, es decir vivos y sensibles.

Con base en esta norma, hace varios años una juez en Argentina le otorgó el amparo de Habeas Corpus a La orangután Sandra y ordenó su traslado de un zoológico a un santuario. Aunque en el ámbito internacional son muchos los países que han adaptado el derecho a la solicitud de sus poblaciones de reconocerles derechos a los animales, en el caso colombiano los casos de maltrato no parecen tener fin.

Hace apenas cinco días fue capturado un adulto mayor porque sus vecinos denunciaron y aportaron videos cuando este violó a unos gallos en el sur de Bogotá. Este miércoles un caso aberrante fue denunciado en Barranquilla, un sujeto le cercenó una pata delantera a un perrito con un machete.

Casos que se evidencian en las redes y que parecen no tener control. Animales famélicos, abandonados, quemados, mutilados, violados se ven a diario. Sin embargo, son pocos los que llegan a juicio como es el caso de Carlos Alberto Mora Alape. 

Dentro del proceso, además de recusar a la juez que está a cargo de su proceso bajo el argumento de que es animalista porque la funcionaria tiene fotografías de mascotas en sus redes, también contrató un investigador para que acopie otras pruebas en su favor. 

Juzgados de Paloquemao Bogotá

 

Según estadísticas de la Fiscalía en lo que va corrido del año se han interpuesto más de 600 denuncias por este delito. Adicionalmente, un estudio de la universidad de La Salle, señala que entre 2010 y 2016 fueron abandonados en Colombia 33.000 animales, lo cual constituye otra forma de maltrato animal. Así mismo, el Instituto de Protección Animal de Bogotá reveló que desde su creación en 2016 ha atendido más de 150.000 animales en condiciones de maltrato. 

El proceso contra Carlos Manuel Mora Alape avanza con varias particularidades. El 13 de febrero de 2017 pasó a conocimiento de los jueces. Con un antecedente y es que el médico quiso hacerle el quite a la justicia. De hecho, en un principio no compareció a dos audiencias de imputación convocadas el 14 y 28 de febrero de ese año. Finalmente requerido de nuevo por la Fiscalía, compareció a los estrados el 17 de marzo de ese año. 

Actualmente, Carlos Manuel Mora Alape está en la etapa de juicio oral. Espera que el juzgado 29 Penal de conocimiento resuelva la recusación que formuló en contra de la juez 28 penal municipal por aparecer en fotografías con mascotas. En el entretanto, la familia Suárez espera que se haga justicia frente a la muerte a golpes de Blair, una yorker que consideraron un miembro más de su familia.

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