Defensoria del Pueblo a la espera de 14.000 colombianos devueltos de Estados Unidos

En los próximos meses llegarán al país 14.000 colombianos inadmitidos provenientes de Estados Unidos. Son los efectos de la política migratoria del presidente Joe Biden.

Es el anhelado ‘sueño americano’ que con el paso del tiempo no se pierde. Miles de connacionales de todas las regiones que aún creen que el país norteamericano es la salvación a sus afugias.

Pero sucede lo de siempre. Los colombianos rebuscadores y resilientes no se resisten a no entrar a Estados Unidos, y terminan en manos de la ‘migra’. Es tal la magnitud de los devueltos que la Defensoría del Pueblo  anunció que mantendrá el acompañamiento y la recepción de testimonios y quejas. 

Su titular, el defensor del pueblo, Carlos Camargo no da abasto para tratar de cubrir todas las misiones humanitarias y acompañamiento a los miles de desarraigados fuera del país. Ni que decir de su trabajo en Colombia donde el día supera al otro en requerimientos de ayuda y apoyo.

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Por ejemplo, la entidad acompañó este miércoles y jueves el retorno al país de 346 migrantes. A su llegada, los inadmitidos le contaron a la entidad que recibieron malos tratos durante su estancia y en el vuelo de regreso desde Estados Unidos. Relataron varias vulneraciones a sus derechos.

Una de las más dicientes, según los testimonios de los retornados, fue la agresión física contra un adolescente de 17 años, quien también fue esposado. Varias de las madres contaron que fueron esposadas sin una razón aparente, y una mujer narró que fue agredida durante el vuelo de regreso, pues la tomaron del cuello provocándole una lesión. 

La queja más recurrente fue la falta de información sobre el retorno de los connacionales; en el avión, la indagación constante de los retornados provocaron las presuntas agresiones de las personas encargadas de acompañar los vuelos. 

Las familias sostienen que no se les informó nada sobre las gestiones para el retorno que adelantó el Gobierno de Estados Unidos y que no conocían que regresarían a Colombia. “Fuimos tratados como delincuentes”, aseguraron. 

El equipo de la Defensoría del Pueblo que estuvo en el aeropuerto pudo constatar que las familias llegaron alteradas por el desconocimiento total de los trámites y el temor a enfrentar agresiones verbales y físicas; además, por el trato que recibieron en los Centros de Procesamiento de Estados Unidos.

El reporte de la Defensoría del Pueblo, que recoge los testimonios de los retornados, da cuenta de constantes afectaciones a sus derechos fundamentales; precisamente, narraron que la comida suministrada era insuficiente y estaba en muy malas condiciones. 

También revelaron que existe un maltrato a los niños, niñas y adolescentes por la falta de alimentación, interrupción del sueño en la noche y la madrugada, no entrega de medicamentos, largos periodos de tiempo sin poder bañarse. 

Las familias informaron que, durante su estancia en el centro de procesamiento, se les impidió el uso de zapatos, por lo que estuvieron descalzos todo el tiempo que fueron retenidos. Además, relataron que sus pertenencias fueron incautadas y posteriormente eliminadas. Los inadmitidos llegaron solamente con la ropa que tenían puesta y sus papeles. 

Es urgente que la Comisión Intersectorial para el Retorno agilice las acciones que permitan garantizar los derechos de los migrantes colombianos, señaló la entidad en un comunicado. La labor humanitaria de la Defensoria del Pueblo continuará.

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