Avioneta del siniestro en Guaviare con tres adultos y cuatro niños ya se había accidentado en el Vaupés

En un revelador informe emitido por la Aeronáutica Civil, se ha conocido que la avioneta de matrículas HK2803, que se extravió el pasado primero de mayo en Guaviare, y que mantiene en vilo a toda una comunidad en busca de cuatro niños desaparecidos, ya había protagonizado un siniestro previo el 25 de julio de 2021 en Vaupés, a tan solo 15 metros de altura. Estos nuevos detalles arrojan luz sobre los antecedentes de esta tragedia que ha conmocionado al país.

El informe preliminar de la Aeronáutica Civil revela que la misma avioneta HK2803, que transportaba al menos siete personas y que sufrió un siniestro en Guaviare, dejando tres muertos y cuatro menores de edad desaparecidos hasta el momento, ya había registrado un accidente años atrás, pero en el departamento del Vaupés. 

Estos hallazgos, encontrados por Vanguardia Liberal indican que el siniestro anterior tuvo lugar el 25 de julio de 2021 en la pista de San Miguel, ubicada en la comunidad de Sonaña, Vaupés, poco después de despegar del Aeropuerto Vanguardia de Villavicencio.

Según el informe obtenido en esa fecha, la aeronave Cessna U206G de Trabajos Aéreos Especiales, Ambulancia, con matrícula HK-2803, estaba programada para realizar un vuelo humanitario desde el Aeropuerto de Vanguardia en Villavicencio hacia la pista San Miguel en la comunidad indígena de Sonaña, con una escala previa en el aeropuerto Fabio Alberto León en Mitú, Vaupés. En ese vuelo se encontraban a bordo el piloto, un médico y un paciente para el cual la empresa Air Medical Service había contratado una misión de ambulancia.

De acuerdo con el informe, la aeronave despegó del Aeropuerto Vanguardia a las 8:00 de la mañana en un "vuelo de traslado" que transcurrió sin incidentes. A las 10:30 de la mañana aterrizó en Mitú, donde se realizó el cambio de tripulación. 

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Posteriormente, despegó con un nuevo piloto y un médico a bordo rumbo a la pista San Miguel en la comunidad indígena de Sonaña, para cumplir con la misión humanitaria contratada por Air Medical Service.

Sin embargo, la situación cambió repentinamente. El informe revela que el piloto comenzó a elevar su alerta situacional cuando inspeccionó los parámetros del motor y descubrió que la temperatura del aceite y la temperatura de la cabeza de los cilindros estaban aumentando de manera significativa, al tiempo que la presión de aceite disminuía. 

El informe indica que los problemas en la cabeza del cilindro del motor aumentaban considerablemente mientras la presión de aceite disminuía. A continuación, el piloto buscó un lugar adecuado para realizar un aterrizaje de emergencia, pero debido a las características del terreno selvático, no pudo encontrar ninguno. En su lugar, decidió dirigirse hacia la pista cercana del Resguardo Indígena Sonaña.

Según el informe de la Aerocivil sobre los movimientos de la aeronave, el piloto intentó reiniciar el motor sin éxito, lo que llevó a realizar un aterrizaje forzoso. A medida que se acercaba al suelo, la aeronave golpeó algunas ramas, lo que obligó al piloto a maniobrar para reducir la velocidad mientras el fuselaje rozaba los árboles.

Una vez que la aeronave se detuvo, la parte delantera cayó al suelo desde una altura aproximada de 15 metros. El pasajero para el cual se había contratado el vuelo resultó ileso, pero el piloto sufrió una lesión leve en la cabeza. 

Los sobrevivientes se alejaron momentáneamente de la aeronave para prevenir posibles incendios, aunque finalmente no se produjo ninguno. Luego, el piloto se acercó y aseguró algunos sistemas de la aeronave.

Al igual que en el accidente anterior ocurrido el primero de mayo con la misma avioneta, se utilizó otra aeronave para localizar la accidentada y a sus ocupantes.

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