Senadora Paloma Valencia detalla que ceses al fuego aumentan la inseguridad y violencia en el país

La senadora del Partido Centro Democrático, Paloma Valencia, ha alzado su voz en una columna de opinión para expresar su inquietud sobre los ceses al fuego pactados por el gobierno con el ELN y las disidencias de las FARC. Según la senadora, en lugar de reducir la violencia, estos ceses al fuego han incrementado la inseguridad en el país.

Durante el año 2023, se han registrado más de 1.000 violaciones al cese al fuego, lo que plantea interrogantes sobre la efectividad de esta estrategia gubernamental. 

La senadora Valencia cita un informe de Coordinadora Humanitaria que detalla más de 400 violaciones en regiones críticas como Cauca, Caribe y Antioquia. Además, el ELN habría perpetrado 43 homicidios, 35 secuestros y 12 confinamientos durante este período. 

La situación es aún más alarmante si se considera que el año pasado se registraron 188 asesinatos de líderes sociales en el país.

Uno de los aspectos más preocupantes es el crecimiento de los Grupos Armados Organizados en Colombia, que actualmente cuentan con cerca de 20 mil hombres, cifra cercana a la que tenía el país en 2008. 

La Defensoría del Pueblo revela un aumento en la presencia de las disidencias de las FARC y el ELN en municipios a lo largo y ancho del país, lo que demuestra que estos grupos están ganando terreno en lugar de ser debilitados.

Además, la senadora Valencia hace hincapié en la presencia de 18 Grupos Delictivos Organizados que operan en diversas regiones de Colombia, lo que contribuye aún más a la complejidad del panorama de seguridad. Estos grupos, como La Cordillera en Pereira, Los Flacos en Valle del Cauca, y otros, están causando estragos en sus áreas de influencia.

Lea también (Ficha investigada y cercana al exsenador “Ñono” Elías llega a la Diari, eje del control fiscal en Contraloria)

Las estadísticas de seguridad consolidadas de 2023 son preocupantes, ya que muestran un aumento significativo en la violencia en comparación con el año anterior. Las masacres aumentaron un 8%, el secuestro un 56%, la trata de personas un 26%, la extorsión un 5%, la invasión de tierras un 1%, los delitos contra el medio ambiente un 25%, y el hurto a personas un 4%. Estos números evidencian una escalada de la violencia en el país.

La senadora Valencia también critica la decisión del gobierno de reducir drásticamente la lucha contra el narcotráfico, disminuyendo el número de grupos móviles de erradicación y reduciendo el presupuesto destinado a la intervención de cultivos ilícitos. Esto resultó en una disminución del 71% en la erradicación de cultivos de coca en 2023.

La nueva política de drogas implementada por el gobierno, que enfatiza la interdicción, tampoco ha tenido el impacto deseado. A pesar de los esfuerzos, la incautación de cocaína apenas aumentó un 12% en 2023, y el gobierno no pudo cumplir su propia meta de incautación.

La senadora Valencia concluye su columna destacando que la lucha contra la financiación ilegal, como la minería ilegal, también ha fallado. La incautación de insumos sólidos y líquidos ha disminuido significativamente, y la explotación ilícita de minerales se ha extendido a 323 municipios.

En resumen, Paloma Valencia argumenta que las políticas de ceses al fuego y la disminución en la lucha contra el narcotráfico están permitiendo que los grupos al margen de la ley se fortalezcan y sometan a la población civil, lo que representa un grave problema de seguridad en Colombia.

Otras noticias: