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Controversia por ausencia de ocho días de presidente Gustavo Petro: golpe en rodilla su excusa
El mandatario aseguró que trauma en extremidad lo afectó. Funcionarios dan explicaciones contradictorias.
El retorno del presidente Petro a la esfera pública después de una ausencia de ocho días ha generado múltiples interrogantes. El mandatario reapareció portando un moretón en la rodilla, señalando una caída en Cartagena como la razón detrás de su ausencia no planificada y el incumplimiento de su agenda en Chocó.
La falta de coherencia en las explicaciones proporcionadas por los ministros ha alimentado la especulación y la incertidumbre. Mientras el ministro TIC, Mauricio Lizcano, indicó un compromiso presidencial urgente en Bogotá debido a la crisis entre Palestina e Israel, el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, refutó tales afirmaciones, asegurando haber estado con el presidente en múltiples reuniones.
La administración ha enfrentado críticas por la falta de transparencia, exacerbada por la ausencia de una agenda pública clara y comunicaciones inconsistentes.
Los intentos de obtener claridad sobre la programación y las actividades del presidente han sido en vano, con la secretaria de Comunicaciones y Prensa de la Presidencia y el Departamento Administrativo de la Presidencia manteniendo silencio.
La recurrencia de ausencias del presidente Petro, con más de 100 contabilizadas durante su mandato, ha sido una fuente de controversia y desconfianza.
Las respuestas inconsistentes y en ocasiones contradictorias del equipo presidencial han exacerbado la situación.
Incidentes previos, como la prolongada estadía en Brasil y cancelaciones repetidas de agendas, han cuestionado la credibilidad de las explicaciones oficiales.
La salud y capacidad del presidente para cumplir con sus deberes constitucionales han sido cuestionadas. A pesar de las aseguranzas del ministro Velasco sobre la salud del presidente, la falta de una evaluación detallada y transparente ha llevado a un aumento en la solicitud de claridad y transparencia.
En medio de la creciente incertidumbre, el país se encuentra en un estado de espera. La falta de comunicación clara y coherente se ha convertido en un tema de interés nacional, con la ciudadanía, los medios y los actores políticos buscando respuestas.
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