Salvatore Mancuso condena la violencia de militares en Tierralta y propone mesas de paz

Salvatore Mancuso, exjefe paramilitar y figura clave en el proceso de paz colombiano, ha emitido declaraciones en relación a los recientes eventos violentos en Tierralta, Córdoba, donde militares se disfrazaron de guerrilleros e intimidaron a la población local. Mancuso ha condenado enérgicamente estos actos y ha instado a un enfoque de paz y diálogo como solución a los conflictos en la región.

En sus declaraciones, Mancuso señaló que "la violencia contra nuestros campesinos, venga de donde provenga, es inaceptable y merece toda nuestra repulsa y solidaridad". 

Además de condenar la violencia, Mancuso propuso una alternativa para abordar la situación. Abogó por la creación de mesas regionales de paz, con el objetivo de facilitar el diálogo entre diferentes actores armados que operan en la zona del Paramillo, incluyendo al Clan del Golfo. Esta propuesta también se extiende a nivel nacional como parte de un acuerdo más amplio.

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“Les propongo constituir las mesas regionales de paz, como un esfuerzo colaborativo para la construcción de la agenda de paz total en el territorio cómo parte de un gran acuerdo nacional”, indicó Mancuso.

Mancuso enfatizó la necesidad de establecer un mecanismo de alertas tempranas en colaboración con entidades como la Defensoría del Pueblo y la ONU. Este mecanismo serviría para prevenir y abordar posibles conflictos antes de que escalen a niveles violentos. Además, destacó la importancia de involucrar activamente a la comunidad en estos esfuerzos, subrayando que su participación fortalecería la confianza en las instituciones.

Sin embargo, las declaraciones de Salvatore Mancuso han generado diversas opiniones debido a su pasado como exjefe paramilitar. 

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