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María Valencia Gaitán es la nueva directora del Centro de Memoria Histórica

Valencia es la nieta de Jorge Eliécer Gaitán y trabajó como secretaria de Hábitat durante el periodo en que Gustavo Petro fue alcalde de Bogotá.

María Valencia Gaitán
Por Laura Cortés Lamilla | Dom, 02/10/2022 - 16:25 Créditos: Twitter @HOLLMANMORRIS

Este domingo 2 de octubre el presidente Gustavo Petro nombró a María Valencia Gaitán como la nueva directora del Centro Nacional de Memoria Histórica. Lo cual se convierte en un hecho simbólico teniendo en cuenta que Valencia es nieta del político colombiano Jorge Eliércer Gaitán, quien murió asesinado en 1948 y como consecuencia de aquel hecho se dio paso a uno de los sucesos de violencia más históricos del país, conocido como el Bogotazo.

El mandatario hizo el anuncio durante la instalación de la Comisión de Seguimiento, Impulso y Verificación a la Implementación del Acuerdo Final de Paz:

Creo que es una persona adecuada, como víctima que es del proceso inicial de la violencia y por sus dotes académicas, para conducir el Centro y lo que significa la verdad dentro de un conflicto. 

Valencia es arquitecta egresada de la Universidad de los Andes y cuenta con especialización en Artes Gráficas, Escenográficas y Visuales en Colombia. Adicionalmente realizó posgrados en este rubro en la Escuela de Altos Estudios de Ciencias Sociales en París y la Escuela de Arquitectura de Villemin. Así mismo, cuando Petro fue alcalde de Bogotá, Valencia ejerció como secretaria de Hábitat. 

Es importante recordar que el anterior director del Centro Nacional de Memoria Histórica, Darío Acevedo, renunció a su cargo. Su nombramiento fue muy cuestionado debido a su oposición a la Jurisdicción Especial para la Paz y por haber negado el conflicto armado en Colombia, afirmando que “esa no es una verdad oficial". 

Respecto a su paso por aquel puesto de trabajo, Acevedo aseguró que hubo una persecusión en su contra pero que se cumplieron las metas propuestas: 

Hay varias situaciones que se han judicializado, desafortunadamente, que se haya llevado un debate porque no se realizó en los términos en que se deben realizar debates y que por uno pensar de una manera u otra lo denuncien a uno ante órganos de la justicia. Tengo la conciencia tranquila. No someteré mi prestigio a que se derrumbe con una descalificación.

 

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