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Condenan a la Fiscalía General por acoso judicial a magistrada Lina María Guarnizo Torres
Indemnización a la togada por falsas imputaciones y violencia de género
La Fiscalía General de la Nación condenada a indemnizar a Lina María Guarnizo Torres, ex personera de Neiva y actual magistrada de la Comisión de Disciplina Judicial, por falsas imputaciones y actos de violencia de género, intimidación y acoso judicial.
La demanda se originó durante las investigaciones del escandaloso manejo de recursos del régimen subsidiado de salud, en las que Guarnizo fue presionada indebidamente para declarar contra el ex director de la Caja de Compensación Familiar del Huila, Armando Ariza, y otros funcionarios, según el diario local La Nación.
Guarnizo, que en ese momento estaba embarazada y en licencia de maternidad, denunció en agosto de 2017 afectaciones a derechos constitucionales e internacionales amparados.
Las presiones, según ella, fueron ejercidas por el entonces fiscal anticorrupción Ciro Alfonso Castillo Lobelo y el fiscal de apoyo Daniel Fernando Díaz Torres, quien más tarde fue condenado por corrupción.
El acoso y las presiones indebidas fueron denunciadas públicamente por Guarnizo, quien alegó que los funcionarios de la Fiscalía exploraron su información personal sin autorización, la amenazaron con investigaciones ajenas al caso y la obligaron a declarar contra su voluntad.
Además, la Fiscalía reveló falsamente que Guarnizo había pernoctado en la cárcel con Ariza, lo cual fue desmentido por el Inpec.
El esposo de Guarnizo, el entonces juez administrativo Tito Alejandro Rubiano, corroboró las graves afectaciones causadas por la acusación.
Ana Marcela Gómez Amézquita, abogada de Guarnizo, afirmó que la Fiscalía actuó dolosamente, con ánimo de obtener una declaración contraria a la verdad, lo que fue probado con documentos y testimonios.
Por su parte, Castillo Lobelo negó haber ejercido presiones sobre Guarnizo y afirmó que nunca incurrió en actos de corrupción, persecución o intimidaciones.
Sin embargo, el juez Séptimo Administrativo, Carlos Daniel Cuenca Valenzuela, concluyó que las palabras del representante de la Fiscalía constituyeron un trato desigual y una expresión de violencia contra la mujer, produciendo daño al buen nombre y a la honra de Guarnizo, que debe ser reparado.
Este fallo de primera instancia pone de manifiesto la necesidad de garantizar la protección de los derechos de las mujeres y de todas las personas sometidas a investigaciones judiciales, evitando presiones indebidas y actuaciones arbitrarias por parte de las autoridades.
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