Lizzo, ganadora del Grammy, enfrenta acusaciones de acoso sexual por parte de exbailarines

La ganadora del premio Grammy y líder de la positividad corporal, Lizzo, enfrenta acusaciones de acoso sexual por parte de tres de sus exbailarines. Arianna Davis, Crystal Williams y Noelle Rodriguez han presentado una demanda civil explosiva en la que también alegan que Lizzo y su productora Big Grrrl Big Touring, Inc. han generado un ambiente de trabajo hostil.

Estas serias alegaciones contra Lizzo, que tiene 35 años, incluyen un incidente reportado en un club de Ámsterdam, en el que supuestamente presionó a los demandantes para interactuar con artistas desnudos. 

Adicionalmente, se dice que Lizzo avergonzó a una de sus bailarinas por su aumento de peso antes de despedirla, una acusación que parece contradecir su reconocida defensa por la positividad corporal.

La demanda, presentada el martes en el Tribunal Superior del Condado de Los Ángeles, es un conjunto de acusaciones de alto calibre que, además del acoso sexual, incluyen discriminación religiosa y racial, discriminación por discapacidad, agresión y encarcelamiento falso.

Después de un concierto en Ámsterdam, se afirma que Lizzo y su equipo asistieron a un espectáculo de temática sexual en el infame Barrio Rojo de la ciudad. La denuncia sostiene que Lizzo invitó a los miembros del elenco a interactuar físicamente con los artistas desnudos, presionando especialmente a la Sra. Davis para que tocara los senos de una de las mujeres desnudas.

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Otro incidente señala a la cantante de "About Damn Time" ridiculizando a Davis por su aumento de peso, acusándola de no estar comprometida con su papel. Davis fue despedida en mayo después de grabar una reunión en la que Lizzo criticaba las actuaciones de sus bailarines.

En un caso aparte, la capitana del equipo de baile de Lizzo, Shirlene Quigley, también ha sido acusada en la demanda de imponer sus creencias cristianas a los bailarines. Se informa que Quigley se refirió a Davis como una "no creyente" y manifestó abiertamente que nada ni nadie la detendría de hablar sobre su fe.

El litigio, que nombra a Melissa Viviane Jefferson (conocida profesionalmente como Lizzo), a su productora Big Grrrl Big Touring, Inc. y a Shirlene Quigley, busca una compensación por daños no especificados.

Este escándalo surge después de que Lizzo ganara el Grammy a la Grabación del Año por su éxito "About Damn Time", y concluyera su gira mundial en apoyo a su cuarto álbum de estudio, "Special", lanzado en 2022. Los representantes de Lizzo han sido contactados para hacer comentarios, pero hasta el momento no han emitido una respuesta.

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