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Disturbios en el Atanasio Girardot: líderes barristas de Los del Sur en libertad con restricciones
Siguen en proceso judicial, no podrán ingresar a los estadios del país, ni compartir con barristas, entre otras medidas.
El caso que ha conmocionado al mundo deportivo de Medellín da un nuevo giro. Los líderes de la barra brava Los del Sur de Atlético Nacional, señalados por su presunta implicación en los violentos altercados del pasado 16 de abril en el estadio Atanasio Girardot, permanecerán en libertad durante la continuación del proceso judicial en su contra.
El juez 40 de conocimiento, sin embargo, ha estipulado estrictas restricciones para Raúl Eduardo Martínez, Ramiro Andrés Gutiérrez, Andrés Felipe Muñoz y Andrés Felipe Ospina.
Como parte de las medidas cautelares, se les ha prohibido el ingreso a cualquier estadio deportivo colombiano y la salida del país. Además, les está prohibido acercarse a otros miembros de la barra y hacer uso de las redes sociales vinculadas a Los del Sur. Estas restricciones se mantendrán vigentes durante la duración del proceso.
Los incidentes del 16 de abril, previos al partido contra el América de Cali, dejaron un saldo lamentable de 80 personas lesionadas, incluyendo 20 oficiales de policía y 12 trabajadores logísticos.
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Días antes del encuentro, Los del Sur había emitido un comunicado anunciando un corte de relaciones con la dirigencia del Atlético Nacional, aumentando la tensión en la previa del partido.
Tras los hechos, la Fiscalía Seccional de Medellín solicitó medidas de aseguramiento contra los líderes barristas. La fiscal Yiry Milena Amado Sánchez indicó que, aparte de las lesiones físicas, se registraron daños materiales por un valor de $670 millones.
Aunque la Fiscalía sostiene que los mencionados líderes barristas instigaron a otros miembros a cometer actos violentos, el juez argumentó que "no se observan elementos que permitan establecer un posible riesgo de fuga" y, por ende, decidieron continuar el proceso con los acusados en libertad. La decisión ha sido apelada por la Fiscalía.
La Fiscalía ha presentado pruebas sugiriendo que, aunque los líderes no estuvieron directamente involucrados en los disturbios, sí alentaron a los miembros de la barra a realizar actos violentos. El caso está pendiente de revisión por un juez de segunda instancia, quien finalmente decidirá si mantiene las actuales medidas o adopta las solicitadas por la Fiscalía.
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